
Es una crítica a la corrupción moral dentro de ciertos sectores políticos.
El miedo es una emoción muy curiosa.
Mucho.
Y muy paradójica, también.
El secretario general de las Naciones Unidas dijo hace poco que la humanidad ha ingresado en la era del caos. Y que frente a eso poco puede hacer esa organización internacional desbordada por guerras que no puede contener.
El Papa Francisco afirmó el año pasado que ya estamos viviendo la Tercera Guerra Mundial. Y no es el único que lo ve de esa manera.
La eventualidad del choque armado directo entre grandes potencias parece estar permanentemente en agenda. Las armas nucleares están otra vez en primer plano y ya se esbozan como posibilidad.
Ya hace más de 10 años que se supo con documentos extensamente detallados que vivimos en una sociedad vigilada, intensamente vigilada.
Algunos investigadores explican que las fuentes de energía disponibles en el planeta tal vez no sean suficientes para sostener el modo de vida que hemos elegido en este tiempo.
Todos los analistas serios coinciden en que estamos en un cambio de época (pérdida de influencia de Estados Unidos, desplazamiento del poder hacia Asia y retorno de China al papel de gran potencia que había sido interrumpido durante 200 años). Y los cambios de época son peligrosos. La historia muestra que no suelen ser épocas tranquilas sino más bien turbulentas e impredecibles.
Sin embargo el mayor de los terrores sociales parece ser la posibilidad de perder el móvil.
Hay algo que no está bien.
Ok.
Pero ese es el paisaje en el que tenemos que movernos. Parte del paisaje, claro.
https://danieleskibel.com/psicopolitica/
Daniel Eskibel
Es una crítica a la corrupción moral dentro de ciertos sectores políticos.
El dirigente político de Vente Venezuela Omar González, quien fue rescatado de la reclusión en la embajada de Argentina en Caracas en la llamada Operación Guacamaya, aseveró que el 25 de Mayo quedó demostrado la orfandad del régimen de Maduro.
Los tres elementos del título sintetizan las dinámicas globales y locales, en la consciencia de que, si bien los elementos de sostenibilidad del chavismo en el poder son débiles y vulnerables, y que los costos de permanencia comienzan a superar a los costos de salida, también es cierto que, si los compensan con represión fuerte, pueden alargar su permanencia…
En Venezuela sufrimos un apartheid político-electoral con persecución y violación de derechos constitucionales.
La renuncia de Maduro es el camino pacífico y constitucional más expedito para comenzar a superar esta tragedia histórica.
Señaló que limitaciones de Venezuela impiden política de estabilización económica exitosa.