
Los libros que existían en Venezuela antes de 1810 venían de afuera. Ellos se importaban, mayormente de Madrid o Sevilla, y en menor proporción de México y Lima.
Con actos tradicionales llenos de color y de luz, exquisita gastronomía y La Cruz de Mayo vestida, se celebró la llegada de las lluvias que propician la buena cosecha campesina de Santa María.
El noble pueblo de la zona rural cocoroteña, con espíritu Cristiano y en honor a sus tradiciones, salió a las calles, la compañía musical no pudo ser más esplendida: Desde la salida de la Escuela Santa María, haciendo parada en la casa del Maestro Julián León (+) y con llegada al calvario local, disfrutamos de los ritmos musicales del “Ensamble Magisterial Julián León”, su eponimo. Músicos como Adelmo Barrios, quien además es el Maestro Pueblo Ministerial y Director de la reconocida agrupación Las Chamuchinas, junto a los músicos Edward Gutiérrez, Luzmila Pérez, Arelis Ramos, Francisco, Nancy Aponte y Gerardo Petit Acompañaron la ruta.
La Cruz Mayor del pueblo recibió las cruces adornadas de los niños y de las niñas. Aquí nos esperaba el “Ensamble Alma Llanera”, agrupación que se integra de estudiantes del Bachillerato del C.E Santa María. Su Director Alexis Arráez y todos los trasmisores genéticos de la siempre orgullosa agrupación Golperitos de Santa María son los jóvenes Luiselis Ruda, Emmaris Hernández, Genesis González, Keiberlis Alejos, Yogerlis Aguilar, Yoiber Ochoa, Jeancarlis Montoya y Yhankelis Pacheco quienes nos deleitaron con Salves, tonos y décimas sacramentales, al cierre, se unieron los dos Ensambles y parrandearon con cantos de fulias.
Las docentes de la Escuela Santa María del nivel Primaria fecundan en este acto la identidad cultural originaria en sus niñas y niños. Risas, rituales y cantos en adoración a Cristo, quien transformó este símbolo, la Cruz, en semiología de resurrección, de aquí la veneración y la adoración al Unigénito de Dios, Jesucristo
Finalmente el disfrute de la tradicional chicha, las manducas y las cachapas. Agradecimiento a Dios por parte de la Directora Guillermina Ríos, las Maestras, los cantantes, vecinos y estudiantes.
Los libros que existían en Venezuela antes de 1810 venían de afuera. Ellos se importaban, mayormente de Madrid o Sevilla, y en menor proporción de México y Lima.
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