
Los libros que existían en Venezuela antes de 1810 venían de afuera. Ellos se importaban, mayormente de Madrid o Sevilla, y en menor proporción de México y Lima.
Los cananitas eran politeistas y según algunos historiadores Jehová era uno de sus dioses menores junto con Baal, Astraté y Anat. Recordemos que los hebreos eran uno de los autóctonos pueblos cananitas, junto con los fenicios.
Como sea, cuando los hebreos en un momento dado se declararon monoteistas, su dios único resultó ser Jehová.
Según otras referencias religiosas "Jehová" viene de "YHVE" que se deriva de las iniciales de los cuatro nombres de Dios en la Biblia hebrea: Yah, He, Vah y Elohim. Esa versión no cuadra del todo por el hecho que la religión judía es muy anterior a la biblia.
Refinando conceptos religiosos, los judíos enunciaron que no era correcto llamar a dios por su nombre y de esa forma, aunque en la biblia se escribe Jehová, en la lectura dicen en voz alta "Adonai" o "Hashem".
Inclusive en inglés suelen escribir G-d y en español D-os ateniéndose al mismo concepto.
Los libros que existían en Venezuela antes de 1810 venían de afuera. Ellos se importaban, mayormente de Madrid o Sevilla, y en menor proporción de México y Lima.
En Yaracuy se bautizó el libro Umbrales e Infinitos de la periodista Jessica Serrano.
En 1858, tras una década en el exilio, el general José Antonio Páez regresa a Venezuela por invitación del gobierno. Una ley de amnistía y un accidentado viaje marcan su último retorno a la patria.
Laura Zommer, Armando.info y Patrícia Campos Mello reciben el Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo 2025.
Es una crítica a la corrupción moral dentro de ciertos sectores políticos.