CREYENTES O NO: CREYENTES EN CRISTO JESÚS.

CREYENTES EN CRISTO JESÚS

1: Tesalonicense: 5: 18.

ACTITUDES PROPIAS DE LOS CREYENTES CRISTIANOS.

12. Hermanos le rogamos a todos que tengan respeto de los que trabajan entré ustedes, y los dirigen en las cosas del señor y los amonestan.

13. Deben estimarlo y amarlos mucho, por el trabajo que hacen. Vivan en paz unos con otros.

14. También les encargamos, hermanos,  que reprendan a los indisciplinados, que animen a los qué estén desanimados que ayuden a los débiles y tengan paciencia con todos.

15. Tengan cuidado de que ninguno pagué mal por mal  al contrario, procuren hacer siempre el bien, tanto entré ustedes mismos como ante todo el mundo.

16. Estén siempre contento.

17. Oren en todo momento.

18. Den gracias a Dios por todo, porque esto es lo que el quiere de ustedes, como creyentes en Cristo Jesús.

19. No apaguen el fuego del Espíritu.

20. No desprecien el don de profecía.

21. Sométanlo todo a prueba retengan lo bueno.

22. Apártense de toda clase de mal.

23. Que Dios mismo, el Dios de paz, los haga a todo ustedes perfectamente santos, y les conserve todo su ser, Espíritu, alma y cuerpo. Sin defecto alguno, para la venida de nuestro Señor Jesucristo. (1: Tesalonicense: 5: 12.23).

COMENTARIOS.
El apóstol Pablo ora para  que todos podamos ser santificados, con más perfección, porque muchos creemos estar santificados, pero no totalmente mientras estemos en éste mundo; por lo tanto, debemos orar y perseverar  por la santidad completa, mientras seguimos adelante en busca de ella.

DIOS NOS LLAMA A UNA VIDA SANTA (1: Pedro: 1: 14. 25).

La santidad es el deseó y el deber de todo Creyente, debe estar en todos los asuntos. Y en cada condición, para toda la gente. Debemos velar y orar especialmente, en contra de los pecados a los que estamos inclinados. La palabra escrita de Dios, es la regla más segura, en  la vida del Creyente, y por esta regla
se nos manda a ser santos en todo, Dios hace santo a quiénes salva. Porque cómo vamos a fallar si Dios nos sigue  ayudando con su santo Espíritu en su  buena obra en el alma. La palabra de Dios es implantada en el corazón.
 

Por el Espíritu Santo, es un medio de vida Espiritual, que nos estimula al deber, obrando un cambio total en nuestras disposiciones y afectos del alma, hasta que la lleva a la vida eterna, el contrastes entre el hombre natural y el hombre espiritual es el que ha nacido de nuevo, espiritualmente renovado. Nótese la vanidad del hombre natural su existencia es como la hierba, o  la flor que pronto se marchita y muere. (Isaías: 40: 7.8).

Debemos oír y recibir la santa palabra de Dios, porque es necesario perderlo todo y no perderla a ella, debemos alojarla en nuestro corazón, cómo nuestro único tesoro, y prenda segura del tesoro de gloria, que hay para los creyentes en el cielo. Debemos orar siempre a Dios para que perfecione su obra, en nosotros hasta que podamos ser presentado sin falta ante su trono de gloria. Los hermanos debemos orar unos  por otros y así expresar nuestro amor fraternal, cómo creyentes cristianos que somos.          

EL AMOR SE DEMUESTRA CON HECHOS. (Santiago: 2: 14.26).

Está epístola debe ser leída por todos los hermanos, y bien interpretada, para poder ser predicada y explicada  a toda la gente corriente. Que no lea las escrituras,  porqué es nuestro deber exhortar a qué lo hagan.

RECOMENDACIÓN DE PABLO A TIMOTEO A ESCUDRIÑAR LAS ESCRITURAS (2: Timoteo: 3:10. 17).

La palabra de Dios no debe tenerse escondida ni predicada en idiomas desconocidos, si no  traducirla y explicarla claramente. Ya que a todos los hombres, corresponde conocer las escrituras, para que todos los hombres puedan leerlas y entenderla, las escrituras deben ser leídas en todas las congregaciones públicas Cristianas o no Cristianas, pará el beneficio de los incrédulos.

UTILIDAD DE LOS DONES ESPIRITUALES ESPECIALMENTE EL DE  PROFECÍA (1: Corintios: 14.22).

Porque no necesitamos más que conocer la gracia de nuestro Señor Jesucristo. Pará hacernos felices y dichosos, el es una fuente de gracia que siempre fluye y rebasa Para Suplir todas nuestras creencias y carencias.

DIOS CUIDA DE SUS HIJOS. (Mateo: 6: 25.34).

Las almas fieles pueden oír que se les elogia sin envanecerse, la felicitación de lo que es bueno en ellos, lo ponen a los pies de la cruz de Cristo Jesús. Los creyentes no solo  deben saber  lo que tienen que hacer, si no lo que pueden hacer como las cosas más sencillas y corrientes de la vida, como el buen ánimo y la buena voluntad, sirviendo con ello a Dios y procurando así su gloria, los que dan a conocer libremente el Evangelio de Cristo, serán ayudados por aquellos que no lo hacen pero que tienen  los medios pará ayudar a los que lo están haciendo, y de esta manera se pueda cumplir con la misión de predicar el evangelio eterno.

HERMANO EN CRISTO

LUIS PRIMERA.

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