
¿Debemos enseñar a los bebés a dormir solos toda la noche?
Salud y medicina05 de febrero de 2025 Por Cristina Cruz González
Imaginemos el escenario de una noche cualquiera. Una familia está en casa. Es la hora de dormir, y mamá y papá despiden a su retoño en su habitación leyendo un cuento antes de acostarse. Minutos después el bebé comienza a llorar. Los padres debaten diferentes alternativas: dormir de nuevo con él por solo una noche más, consolarlo y volverlo a dejar solo... Sentimientos de culpabilidad acechan mientras escuchan el llanto incesante.
Esta escena resulta tan común para tantos padres que genera un interesante debate: ¿es necesario enseñar a los bebés a dormir solos toda la noche? Si es así: ¿cuándo es el mejor momento?
La exterogestación: recién nacidos dependientes
A diferencia de otras especies que pueden valerse por sí mismas a las pocas horas de nacer, un bebé humano es completamente dependiente. Esta “gestación fuera del útero” es conocida como exterogestación, una fase crucial en la que el bebé necesita cuidados intensivos que le aseguren una transición segura y afectiva del vientre materno al mundo exterior.
Debido a esto, durante nuestra edad más temprana, el contacto físico y la proximidad con los cuidadores son esenciales. De hecho, en muchas culturas dormir junto a los padres (comúnmente llamado colecho) es una práctica habitual, ya que permite que los bebés se sientan más cómodos, seguros y regulados emocionalmente. Además, investigaciones en esta línea han descubierto que, para los más pequeños, dormir separados de papá y mamá en los primeros meses de vida podría generar niveles elevados de estrés.
Crisis evolutivas y la necesidad del apego
Los despertares nocturnos en los bebés no son un simple capricho, sino una manifestación natural de su desarrollo neurológico y emocional. Durante el primer año de vida, atraviesan distintas fases de crecimiento conocidas como crisis evolutivas, en las que el apego seguro juega un papel fundamental.
En este período, los bebés empiezan a reconocer que ellos y su madre son seres separados, lo que puede generar incertidumbre y emociones complejas. Un ejemplo claro es la angustia por separación, que suele surgir alrededor de los 8 meses y provoca una mayor necesidad de contacto con sus cuidadores para sentirse protegidos .
Cuando un bebé se despierta llorando y es consolado por sus padres, no está siendo “malacostumbrado”. Más bien, está recibiendo la confirmación de que sus necesidades son importantes y de que puede confiar en su entorno. Estas respuestas consistentes y afectuosas contribuyen a la formación de un apego seguro, que a largo plazo favorece una mayor autoestima y mejores habilidades para afrontar el estrés.
Dormir solo: ¿una norma cultural?
La idea de que los bebés “deben” dormir solos es una creencia relativamente moderna y profundamente influenciada por la cultura. En muchas comunidades tradicionales, el colecho es la norma y se considera una forma natural de criar a los niños. Por ejemplo, en Japón, los niños suelen compartir la cama con sus padres hasta los 5 o 6 años, sin que esto afecte su autonomía ni su desarrollo emocional .
Por otro lado, en muchas sociedades occidentales se ha extendido la idea de que dormir en solitario fomenta la independencia infantil. Sin embargo, la investigación sugiere que la autonomía no surge de la separación temprana, sino de la seguridad emocional. Un bebé que crece sintiéndose apoyado y acompañado desarrolla una mayor confianza en sí mismo y mejores habilidades para manejar el estrés en la edad adulta.
¿Cuándo termina la exterogestación?
Investigaciones en esta línea sugieren que una vez pasada la etapa de exterogestación, alrededor del año de vida, es un buen momento para comenzar a fomentar la independencia del niño en el sueño. No es imprescindible esperar a que comprenda explicaciones verbales, ya que los hábitos y las rutinas pueden ayudarle a adaptarse de manera natural.
Para ello, se recomienda establecer una rutina nocturna tranquila, incluir un objeto de apego como un peluche y realizar la transición de forma progresiva. Se puede empezar con siestas en su cama, acompañándolo hasta que concilie el sueño, o colocar su cama cerca de la de los padres antes de moverlo a su habitación definitiva.
¿Existen métodos para enseñar a dormir?
Algunas investigaciones sugieren que técnicas como la “espera progresiva”, donde los cuidadores permiten que el bebé llore en intervalos graduales antes de ser consolado, podrían favorecer períodos de sueño más largos. No obstante, otros estudios advierten de que esta estrategia, si se aplica de manera estricta, podría elevar los niveles de estrés en el bebé y afectar su vínculo con los cuidadores.
El verdadero reto radica en encontrar un punto medio que contempla tanto las necesidades del bebé como el bienestar emocional de la familia. Establecer rutinas relajantes antes de dormir y garantizar un ambiente tranquilo puede contribuir a mejorar el sueño infantil de forma progresiva y sin recurrir a enfoques drásticos.
Más que una “técnica”, una decisión de crianza
Que un bebé duerma solo no es una necesidad biológica, sino una elección de crianza influenciada por factores culturales y familiares. Lo fundamental es comprender que el sueño infantil es un proceso evolutivo, sin una única norma universal. Cuando nace un bebé, también nacen unos padres. Esa conexión permite a muchos conocer desde su interior e intuición cuál es la manera más respetuosa de abordar este tránsito en el sueño nocturno.
La cuestión no es si “deben” dormir solos, sino cómo acompañarlos de la mejor manera posible según sus necesidades y la dinámica familiar. Lo esencial es que el bebé crece sintiéndose seguro, protegido y amado.
Cristina Cruz González: Profesora Permanente Laboral en el departamento de Teoría e Historia de la Educación y MIDE, Universidad de Málaga.
The Conversation


Innovación, respeto, información y financiamiento del Gobierno para un plan de salud pública propone el gremio médico venezolano
La propuesta fue presentada este lunes por el presidente de la Federación Médica Venezolana, Douglas León Natera, y el representante de la comisión especial de la FMV Luis Herice con motivo del Día del Médico

¿Es peligroso tomar bebidas muy calientes? La ciencia detrás del cáncer de esófago
Una creciente evidencia apunta a que ingerir líquidos a más de 65 ºC es un factor de riesgo para desarrollar esta enfermedad.

Una mujer cumplió 18 años sin cáncer gracias a los CAR-T

¿Vivimos en una sociedad que promueve las enfermedades mentales o es que somos más conscientes de ellas?

Psicóloga Adriana Paz Castillo: Los migrantes venezolanos que regresan al país están sufriendo un nuevo duelo
Sufrieron al marcharse y ahora, al retornar, vuelven a sumergirse en la tristeza.

¿Por qué se produce un derrame cerebral? Esta tecnología puede ayudarnos a entenderlo

Cuando las redes sociales convierten la gordofobia en norma

Momo, la personificación del «sarcasmo, reproche y crítica»

Los principales asesores del presidente Trump durante sus dos campañas electorales dirimen una dura polémica pública.

11 de marzo de 1884. Muere el Presidente de Venezuela, Dr. Juan de Dios Monzón, en pleno ejercicio de sus funciones.
.

Taller Nacional de Comunicación Popular se realizará los días 11 y 12 de marzo en Caracas.

Ledezma: Crisis económica de Venezuela es la más grande que ha surgido después de la Segunda Guerra Mundial
“Qué pasó con el bolívar fuerte, los taladros y refinerías de Pdvsa y miles de millones de dólares que pagaron por obras que nunca construyeron”, recordó el exalcalde de Caracas Antonio Ledezma.

Clap: nueve años de exitoso desarrollo por la seguridad alimentaria.
La exitosa fórmula de distribución de alimentos nació en Yaracuy y se expandió a todo el país para asistir a la población más vulnerable.


No hay seguridad en cualquier parte del mundo para los migrantes venezolanos.

12 de marzo de 1806: HOY ES DIA DEL TRICOLOR VENEZOLANO. La Bandera que nos identifica como nación.
.
